Lección 11
4-10 de junio
José, experto en sueños
- Los sueños de José. Génesis 37:1-11.
- José iba contando a su padre acerca de la mala conducta de sus hermanos (Gn. 37:2). Parecía evidente que Jacob pensaba poner a José, primogénito de Raquel, por encima de todos sus hermanos (Gn. 37:3).
- Para colmo, José tuvo dos sueños que lo colocaban claramente por encima de sus hermanos (Gn. 37:5-9). Jacob tampoco parecía contento con estos sueños, pero reflexionaba acerca de su posible cumplimiento (Gn. 37:11).
- José vendido. Génesis 37: 12-36.
- Todo ocurrió rápidamente (Génesis 37:13-36).
- Jacob envía a José a ver a sus hermanos (13-14).
- “Casualmente”, un hombre encuentra a José y le indica dónde están sus hermanos (15-17).
- Al verle, sus hermanos deciden matarlo (18-20).
- Rubén intercede por José, con intención de salvarle (21-24).
- Judá propone un cambio de planes: venderlo en lugar de matarlo (25-28).
- Los hermanos engañan a Jacob, y le hacen creer que José está muerto (29-35).
- En Egipto, José es vendido a Potifar (36).
- Todo ocurrió rápidamente (Génesis 37:13-36).
- Interludio: Judá y Tamar. Génesis 38.
- Judá se separó de sus hermanos, se casó, y tuvo tres hijos (Gn. 38:1-5). Er, el primogénito, se casó con Tamar. Entonces, Dios comenzó a actuar directamente contra la maldad de los hijos de Judá (Gn. 38:6-10).
- Sin embargo, Dios no actuó contra Judá y Tamar cuando ambos actuaron de forma incorrecta (Gn. 38:11-18). Pero Judá reconoció su error, y Tamar fue considerada justa (Gn. 38:26). Dios transformó el mal en bien y, por gracia, redimió a Tamar.
- José prisionero. Génesis 39.
- José fue puesto al cargo de toda la hacienda de Potifar, sin que su éxito le corrompiese. Al contrario, se negó a ceder a las insinuaciones de su ama (Gn. 39:9). Sin embargo, acabó en la cárcel. Vuelta al principio.
- En la cárcel Dios hizo tres cosas con José: (1) estuvo con él; (2) le extendió su misericordia; (3) le dio gracia a los ojos del jefe de la cárcel (Gn. 39:21).
- Nuevamente, fue puesto al cargo de todo (Gn. 39:22-23). José nunca olvidó de dónde provenía su éxito, y retuvo su fidelidad a Dios en toda circunstancia.
- Los sueños de Faraón. Génesis 40:1-41:36.
- Tras interpretar los dos sueños, el del copero y el del panadero, José espera una pronta liberación de la cárcel (Gn. 40:14-15). Pero la libertad no llegó.
- Luego, leemos de dos nuevos sueños y de otro soñador preocupado, deseoso de conocer su significado. Tras dos años de espera, el tiempo de Dios había llegado (Gn. 41:1-14).
- Ante Faraón, José sigue sin olvidar de quién depende su éxito: “No está en mí; Dios será el que dé respuesta propicia a Faraón” (Gn. 41:16).
- Tras muchos años de espera, al ser puesto sobre toda la tierra de Egipto, comenzaba a vislumbrarse el cumplimiento de los dos sueños de José (Gn. 41:41).